Una profunda tradición vinícola
La carretera recta y llana que me trae desde Madrid va dejando a los lados alguna casa blanca y campos de vides que maduran bajo el implacable sol manchego. Dispersos aquí y allá junto a las hileras de vides, se ven algunas chozas, esas pequeñas construcciones de piedra que sirven de almacén y de abrigo para las labores del campo. Ya quedan pocos kilómetros para llegar a Socuéllamos, considerado la “Patria del Vino” de La Mancha, en el límite oriental de la provincia de Ciudad Real.
A la entrada de Socuéllamos, me recibe el Monumento al Podador, un tributo al agricultor que realiza uno de los trabajos primordiales en el cuidado anual de las vides. La escultura mira hacia la cercana Cooperativa del Cristo de la Vega, que surgió en 1955 por iniciativa de 25 agricultores. Convertida hoy con orgullo en una bodega mucho más sofisticada, elabora y vende ricos caldos tras sus paredes blancas que refulgen con el sol.
Aunque mi visita de dos días a este municipio de La Mancha no ha hecho más que empezar, comprendo rápidamente que aquí la tradición vinícola está tan arraigada que Socuéllamos y la cultura del vino son dos conceptos prácticamente indisociables.
La Virgen de Loreto y la Fiesta de la Vendimia
Es a principios de septiembre cuando cada año tiene lugar en Socuéllamos la gran fiesta del vino. Las uvas rezuman su caldo dulce que ya está listo para ser recogido. Es entonces cuando el pueblo se engalana y celebra durante 10 días la Fiesta de la Vendimia en honor a su patrona, la Virgen de Loreto. A ella se lleva en ofrenda el primer mosto obtenido con las uvas nuevas.
La Virgen se guarda en una ermita con cubierta de tejas coronada por una cruz de forja oscura. El templo llama la atención por su impecable blancura, tan propia de estos pueblos manchegos. En el interior, la cara casi de niña de la imagen de la Vírgen y su manto claro con delicados bordados en oro, emanan suavidad, fe y ternura.
Y es que aquí la devoción a la Virgen de Loreto es grande. Junto a la puerta de la ermita un ventanuco permite ver la imagen desde el exterior para que los fieles puedan seguir rezando a su patrona incluso cuando las puertas de la ermita están cerradas.
Como curiosidad, hay que decir que la Virgen de Loreto es también la patrona de la aviación. Y es por eso que un estilizado avión de caza sorprende en el centro de la rotonda junto a la que se encuentra la ermita. Se trata de un Mirage F-1 cedido por la cercana Base Aérea de Los Llanos de Albacete, con la que Socuéllamos está hermanada. ¡Qué contrastes tan sorprendentes!
Museo Torre del Vino de Socuéllamos
Fuera del tiempo de vendimia, Socuéllamos sigue siendo un destino de enoturismo de lo más atractivo. Forma parte esencial de la Ruta del Vino de La Mancha y es uno de los mayores productores de vino de la comarca manchega.
Socuéllamos cuenta con un interesantísimo Museo Torre del Vino y visitarlo es una cita imprescindible. Con un ameno material interactivo, se explican los orígenes de Socuéllamos, el ciclo anual de la vid y los trabajos del campo, el ayer y el hoy de la vendimia o la química y la elaboración del vino. Se habla también de los sentidos, del gusto, del olfato y de las catas de vino. La tradición popular se recoge en forma de refranes, dichos y preciosas fotografías en blanco y negro de décadas pasadas. En este museo de Socuéllamos se realizan también numerosas actividades de Mancha Vino, una iniciativa que celebra actividades todo el año en torno al vino de La Mancha
La torre destaca desde el exterior del museo por sus líneas contemporáneas y su estructura acristalada en su parte superior. Y es que es un mirador fabuloso que, desde sus 40 metros de altura, se abre a los tejados y a las llanuras de viñedos y campos que rodean a Socuéllamos.
También desde lo alto se divisan las grandes cubas metálicas de la Bodega del Cristo de La Vega, el centro urbano, la curiosa Iglesia de San José y la antigua Estación de Tren donde una vez paró la reina Isabel II con una bolsa de terciopelo llena de monedas para el pueblo. Mirando hacia el casco histórico sobresale el gran volumen de la Parroquia de Nuestra Señora de la Asunción.
Museo Torre del Vino 📍C. el Ferial, s/n, 13630 Socuéllamos, Ciudad Real 📞 +34 926674905 🌐 torredelvino.com
Geometría castellana
Las calles de Socuéllamos están flanqueadas por casas de altura baja, de paredes lisas y encaladas y techo de teja. Me gusta la sencillez geométrica, las líneas rectas que contrastan con el cielo tan azul. El blanco luminoso refleja el brillo de La Mancha, las rejas de forja evocan la resistencia de la tierra castellana y, en algunas fachadas, una franja de azul rotundo lo subraya todo.
Las persianas pintadas o los característicos separadores de cintas dibujan preciosos cuadros minimalistas sobre las paredes blancas. En el interior de muchas casas se mantiene un costumbrismo de muebles de herencia, fotos de familia y ajuares. La tradición y la historia familiar aquí siguen siendo importantes.
El casco antiguo de Socuéllamos
El primer testimonio escrito de la existencia de Socuéllamos se remonta al siglo XIII, bajo el reinado de Fernando IV. Es en el casco antiguo de Socuéllamos donde perduran algunos edificios de piedra que reflejan aún hoy retazos de historia.
La Casa de los Mendoza, también llamada Casa de la Encomienda fue construida en 1440 por los comendadores de la Orden de Santiago. Perteneció más tarde a Antonio de Mendoza, virrey de México y Perú, quién introdujo en Socuéllamos las ideas renacentistas. En los sólidos muros de esta casona en la que llegó a pernoctar Teresa de Jesús se pueden ver aún hoy varios blasones.
Junto a la casa se levanta, alta, imponente y rotunda, la Parroquia de Nuestra Señora de la Asunción de estilo gótico tardío con elementos renacentistas. Alrededor de la Plaza de la lglesia se pueden ver el Antiguo Ayuntamiento del siglo XVI adornado con rejas de forja y otras casas históricas que se relacionaron con el Santo Tribunal de la Inquisición.
Gastronomía manchega
Los buenos vinos deben regar ricos manjares y Socuéllamos es un lugar ideal para probar la gastronomía típica de La Mancha. Son platos austeros, contundentes y sabrosos, que ayudaban a combatir el frío y el cansancio de los trabajos del campo.
Los quesos y embutidos combinan con las uvas maduras y el pan de pueblo, de corteza dura y miga compacta. De pan están hechas también las deliciosas migas manchegas que el propio Cervantes mencionaba en El Quijote: «Que me maten, señores, si el autor deste libro que vuesas mercedes tienen quiere que no comamos buenas migas juntos».
Otro plato tradicional son las gachas manchegas, que se cocinaban en un perolo en el campo y se comían untando en ellas un trozo de pan clavado en una navaja. Son una rica combinación de harina de almorta, ajo, pimentón dulce, panceta y chorizo.
En definitiva, Socuéllamos es paisaje llano de viña, zarcillo y uva. Es blanco limpio, luz cegadora y líneas sencillas. Es tradición que mira al futuro y un enclave que sin duda hay que visitar para llegar a comprender la esencia de La Mancha.
[Algunos lugares recomendados]
⌾ PARA TOMAR UNOS VINOS: bajo los soportales de la Plaza de la Constitución de Socuéllamos hay varios locales, como Cerevisia, ideales para tomar cervezas y vinos a la hora del aperitivo o al atardecer. Además, cuentan con una terraza en verano que se abre a la plaza.
Cerevisia 📍Plaza de la Constitución, 8, 13630 Socuéllamos, Ciudad Real
⌾ PARA COMER: en Socuéllamos se come muy bien. Casa Francisco y Las Brasas son dos restaurantes, dos valores seguros, ubicados en extremos distintos de Socuéllamos.
Casa Francisco 📍C. San Francisco, 69, 13630 Socuéllamos, Ciudad Real 📞 +34 926532940 🌐 mapsu.me
Las Brasas 📍Paseo de la Concordia, 50A, 13630 Socuéllamos, Ciudad Real 📞 +34 667032540 🌐 las-brasas.viajarporespana.top
⌾ PARA DORMIR: el Hostal Genaro es un establecimiento nuevo y sencillo, con todo lo necesario para pasar noche a precios muy razonables. Está además adscrito a la Ruta del Vino de La Mancha.
Hostal Genaro 📍C. Don Pablo Bustos, 2, 13630 Socuéllamos, Ciudad Real 📞 +34 926500981 🌐 hostalgenaro.es
⌾ UNA BODEGA ESPECIAL: Tinedo Bodega y Viñedo. Unas bodegas familiares y tradicionales en las que su propietario, Manuel, nos mostró los viñedos y la historia vinícola de su familia demostrando en todo momento su amor y pasión por la elaboración del vino de La Mancha. La bodega está adscrita a la Ruta del Vino de La Mancha.
Bodegas Tinedo 📍Carretera CM3102 Km 30, 13630 Socuéllamos, Ciudad Real 📞 +34 926118999 🌐 tinedo.com
NOTA: un agradecimiento profundo y muy especial a nuestros anfitriones, Ana Sánchez Huéscar, Puri, Juan y Paco, que nos mostraron lugares, nos dieron a probar la gastronomía local y contaron con orgullo anécdotas de su tierra. Gracias también a mi querida Concha Vallejo por compartir conmigo el descubrimiento de este enclave manchego tan auténtico.
No sé si me gusta más el texto o las fotografías, sólo sé que después de leerlo, me apetece ir a una tierra que nunca antes me había despertado ningún interés… hasta podría plantearme si llamar a una hija Loreto…. bueno, eso quizá s a excesivo….
¡Me encanta tu comentario, amiga! La verdad es que el fin de semana en Socuéllamos fue de lo más divertido. Eso sin hablar de lo bien que se bebe y se come. ¡Ah, y piénsate lo de Loreto! ¡Ya nos contarás! 😉
Un abrazo viajero, Concha